Ingredientes del roscón de Reyes:
125 ml de leche
25 grs de levadura fresca de panadería
400 grs de harina de fuerza
100 grs de azúcar
ralladura de una naranja
ralladura de un limón
1 huevo batido
1 cucharada de ron
1 cucharada de agua de azahar
75 grs de mantequilla (a temperatura ambiente)
Decoración:
1 huevo batido
4 cucharadas de azúcar blanquilla
1 cucharadita de agua
Frutas escarchadas
Azucarillos
Modo de preparación:
Disolvemos la levadura en la leche tíbia y dejamos reposar unos 20 minutos.
Mezclamos la harina con el azúcar y la ralladura de limón y de naranja.
Transcurrido el tiempo de reposo de la leche con la levadura, la incorporamos a la mezcla de la harina. Movemos con los dedos con movimientos circulares y procurando que no quede nada en los laterales.
Cuando tengamos una pasta consistente añadimos el huevo batido, el ron, el agua de azahar y removemos nuevamente con los dedos.
Después, agregamos la mantequilla blanda y mezclamos junto con el resto de ingredientes.
Espolvoreamos la superficie de trabajo con harina que tenemos en reserva y volcamos la masa sobre ella. Amasamos con suavidad hasta integrar todos los ingredientes. Si la masa nos resulta muy pegajosa añadimos más harina. Esto lo haremos con cuidado para no pasarnos y que el roscón quede duro.
Hacemos una bola y la dejamos reposar en un cuenco en un lugar cálido alejado de durante unas 3 horas o hasta que la masa doblado su volumen.
Conviene cubrir con papel film para que no se seque la masa.
Transcurrido el tiempo de reposo, amasamos durante un par de minutos. Después hacemos de nuevo una bola con la masa y le damos la forma del Roscón. Lo ponemos sobre la bandeja en que vamos a hornear, forrada con papel vegetal y dejamos reposar una hora más o menos.
Cuando la masa haya reposado una hora más, pintamos el Roscón con el huevo batido. Y decoramos con frutas escarchadas y con los azucarillos (mezclamos azúcar con agua a zumo de naranja hasta que se forme como pegotes duros).
Llevamos a horno(previamente calentado) a 160 º durante 15 o 20 minutos.
Dejamos enfriar sobre una rejilla.
Podemos abrirlo por la mitad y rellenarlo de nata, crema pastelera, trufa,...
Así también aprovechamos para meter las sorpresas!
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